Se trata de un Challenger 300, perteneciente a la familia Brito, que regresaba de un viaje a Punta del Este. Las dos víctimas eran las únicas personas a bordo. Hay heridos
Un avión privado modelo Challenger 300, matrícula LV-GOK, protagonizó un trágico accidente este miércoles al despistarse al aterrizar en el Aeropuerto de San Fernando, provincia de Buenos Aires. La aeronave, que regresaba de Punta del Este, no logró frenar al ingresar por la cabecera 05 y terminó impactando contra una vivienda cercana.
Según confirmaron fuentes aeroportuarias, el avión era tripulado únicamente por dos pilotos, quienes fallecieron a causa del impacto. La aeronave, propiedad de la familia Brito, había trasladado previamente a pasajeros hacia Uruguay antes de regresar a la Argentina.
El accidente ocurrió cerca de las 13:18, y generó una explosión que provocó focos de incendio en las inmediaciones, afectando viviendas aledañas y causando pánico entre los vecinos. Bomberos desplegaron un operativo para controlar las llamas y garantizar la seguridad en la zona.
Especialistas indicaron que la pista del aeropuerto, de 1.800 metros de extensión, es adecuada para este tipo de aviones. No obstante, el Challenger 300 atravesó la reja de contención, chocó con árboles y finalmente impactó contra las viviendas detrás del aeródromo.
Por el momento, se desconocen las causas del incidente. Ezequiel Sicardi, piloto consultado por C5N, destacó que esta línea de aviones es de última generación y está diseñada para ofrecer altos estándares de calidad y seguridad.
